Erase una vez una casa que se hizo encima de un cementerio indio, la escritura se perdió hace mucho tiempo asi que hicierón una falsa para venderla.
Un día una familia de 5 miembros la compró asi, los espíritus indios empezaron por la habitación del más pequeño, este tenía 2 años, siempre era muy tranquilo pero esos días no quería estar solo.
Los espiritus empezaron a molestar a toda la familia menos a la madre, al padre lo tiraron desde lo alto de la casa pero no murió, al hermano mayor cuando estaba en la cama le metieron un susto haciendo sangrar las paredes y la hermana mediana fue poseída.
Un día los cuatro intentaron matarse unos a otros con cuchillos pero la madre los pilló y lo dejaron, de repente la hija mediana fue al trastero y apareció derrepente el cementerio cuando vieron eso se fueron corriendo y la casa fue destruida trás la denuncia de la familia.
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